Organizada por el Grupo Misionero Universitario Lourdista, se realizó el viernes pasado en Tucumán una Marcha por la Vida entre la plaza Urquiza y la plaza Independencia, que contó con la participación de gran de cantidad de jóvenes -a los que se sumaron familias enteras, con muchos niños- que caminaban vestidos con remeras blancas con la leyenda: “Vida para todos”. Acompañó a los manifestantes una pantalla gigante que transmitía imágenes relativas a las etapas de gestación de la vida, mientras por un altoparlante se emitía el sonido de los latidos del corazón.
Una vez en la plaza Independencia se escucharon testimonios de jóvenes madres y luego alzaron a sus bebés en brazos y los levantaron para que el público pueda verlos, como un homenaje a la vida.
En la convocatoria, los organizadores habían explicado el objetivo de esta marcha: “hacernos escuchar y así concientizar a nuestra sociedad de que no se trata de algo negociable, sino del valor más fundamental y del derecho natural más importante y base de los demás derechos que una persona puede tener”.
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