Quien salva una vida, salva al mundo”, recordó Rocío Gálvez, presidenta del Comité Nacional de Pro-Vida, durante el desayuno conmemorativo en honor a los cien mil bebés y mujeres que han sido salvados del aborto, como resultado de la labor que esta institución realiza desde hace 19 años.Al evento, y como parte del presidium, asistieron diversas personalidades eclesiásticas y del ámbito social, entre las que destacan: Jorge Serrano Limón, director de Pro-Vida; Rocío Galvéz, presidenta de dicha organización; Monseñor Pedro Agustín Rivera, Rector de la Antigua Basílica de Guadalupe; Victoria Saracho, Directora del Centro de Ayuda para la Mujer Latinoamericana; así como la señora Rosa Martha de Abascal, viuda de Carlos María Abascal Carranza.
En el discurso de bienvenida, Rocío Gálvez felicitó a las cien mil madres que decidieron decir sí a la vida y rechazar el aborto como una solución a sus problemas:
“El día de hoy nos felicitamos por la mamás, porque el que sus hijos estén aquí es obra de su valentía”, afirmó.
De acuerdo con la presidenta, cuando se salva la vida de un bebé en el vientre materno, también se rescata a su descendencia, a la madre y a sus familiares, así como a los médicos, a los hospitales y a todos aquellos que participarían en él de alguna forma, pues se cuida su bienestar, su tranquilidad y su integridad moral.
Por su parte, Jorge Serrano Limón destacó el trabajo realizado por Pro-Vida en la lucha por la defensa del concebido, y afirmó que su institución ofrece a las mujeres ayuda integral, orientación y alternativas de vida que tienen que ver con el amor y la fe.
Asimismo, aseguró que con su labor, la institución pretende mostrar que la solución no está en la legalización de las prácticas abortistas, sino en las alternativas de vida, y reiteró que uno de sus principales objetivos es “acabar con el aborto legal”.
“¿Cuánto vale una vida? ¡Una sola vida vale todo el universo!”, puntualizó.
En este sentido, Victoria Saracho informó a los asistentes que el Centro de Ayuda para la Mujer Latinoamericana tiene como objetivo apoyar y mejorar de forma integral las vidas de las mujeres embarazadas, a fin de que sean ellas mismas las que elijan libremente rechazar al aborto. Según Saracho, la organización cuenta actualmente con 44 centros distribuidos a lo largo de la República.
Por su parte, en representación de la Iglesia Católica, Monseñor Pedro Agustín Rivera leyó y entregó a Serrano Limón una carta de parte del Cardenal Norberto Rivera, en la cual se reconoce el trabajo de la asociación Pro-Vida y se le anima a continuar con su causa.
Asimismo, el rector de la Antigua Basílica afirmó que la vida humana comienza desde el momento en que se forma un genoma diferente al de sus progenitores. Esto significa que el embrión es un ser humano en desarrollo, por lo cual se le deben reconocer los derechos que le son propios y que son respaldados por la Declaración de los Derechos Humanos.
De acuerdo con lo expresado por Agustín Rivera, ninguna ley hecha por los hombres puede contradecir lo que es estipulado divinamente.
“No hay futuro para una sociedad que atenta contra los más vulnerables. Esto sólo significaría el retorno de la Ley del más fuerte”, advirtió.
Durante la celebración, se realizó un homenaje al ex Secretario de Gobernación, Carlos Abascal Carranza, quien falleciera a principios de este mes, después de recibir el grado Honoris Causa por parte de la Universidad Anáhuac México Sur.
Jorge Serrano Limón destacó el trabajo y la contribución social de Carlos Abascal, a quien llamó un “político santo”, digno de ser considerado para el proceso de canonización.
“Queremos pedir el inicio de su beatificación y canonización al Arzobispado de México”, informó.
Como parte de este homenaje, la señora Rosa Martha de Abascal recibió el cuadro titulado “La Encarnación”, de manos del Monseñor Pedro Agustín Rivera. A continuación dirigió a los asistentes unas palabras de agradecimiento, y reconoció la labor a favor de la vida que salva a las “criaturas pensadas por el Señor”.
Al término del evento, en entrevista con yoinfluyo.com, Alejandra Nava, madre del bebé número cien mil que es salvado del aborto, afirmó que se encuentra feliz por su decisión y por poder tener a su hija en sus brazos.
Mari Huerta Nava, de tan sólo cuatro meses de edad, es la vida número cien mil que escapa del aborto gracias a Pro-Vida. Su madre estaba decidida a abortar debido a que varios médicos le habían informado que su bebé nacería con problemas irreversibles. Sin embargo, por medio de un anuncio en el periódico, Alejandra llegó a Pro-Vida y fue ahí en donde su vida tomó otro rumbo.
Ahora, con su bebé en sus brazos, perfectamente sana, ella es una prueba más de que lo único que se necesita para salir adelante es amor, valentía y fe.
Jessica Oliva
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