miércoles, 10 de marzo de 2010

"SÍ A LA VIDA, NO AL ABORTO" RESUENA CON FUERZA EN LA CAMPAÑA AL SENADO DE COLOMBIA

Selma Samur presenta su lema de campaña "Sí a la vida, NO al aborto",y una serie de medidas para lograr que en Colombia se respete el derecho a la objeción de conciencia, como lo establece el artículo 18 de la Constitución.
REDACCIÓN HO / ACIPRENSA.- La candidata al Senado N° 100 del Partido Conservador, Selma Samur, denuncia que "frente al caso del aborto provocado, el personal médico sanitario se ha visto expuesto a situaciones que vulneran su derecho a objetar en conciencia". Ante esto, señala, "no hay que olvidar, que quien objeta en conciencia, pretende desobedecer una norma jurídica que atenta contra sus principios personales más íntimos. Por tanto, no se puede presumir que toda objeción de conciencia tenga exclusivamente un fundamento religioso".
Samur precisa además que "es necesario que en Colombia se empiece a hablar de objeción de ciencia y objeción legal. Entendiendo por la primera, aquella objeción que responde a la incompatibilidad de la norma jurídica con la evidencia científica; y por la segunda, aquella objeción que tiene lugar cuando existe conflicto entre dos deberes de carácter legal".
Seguidamente resalta que "en cuanto a las instituciones, es conocido que no pueden objetar en conciencia, porque esta figura solo encuentra sentido en las personas naturales, y no en las jurídicas. No obstante, la Doctrina ha planteado que es posible hablar de ‘objeción ética institucional’, la cual se fundamenta en la misión, visión y valores que las instituciones tienen".
"En suma –concluye– es necesario que el Congreso de la República de Colombia propugne por una defensa de la Constitución y de los derechos fundamentales allí consagrados, actualizándose en los más recientes debates, que sobre el tema de la libertad de conciencia se están dando en el mundo".
Foto: Selma Samur

1 comentario:

Antonio Ostojic dijo...

Colombia, o Méjico, o Argentina, Canadá, España, China, India, continente africano, Oceanía, o cualquier lugar del mundo es el campo del buen combate de la vida. La generosidad y maganimidad de Dios es infinita para con sus hijos, sus creaturas predilectas, y nosotros estamos llamados a ser perfectos como el Padre celestial es perfecto. La matanza de niños intrauterinos nos tiene que sensibilizar como la necesidad social más urgente que tenemos que resolver a favor de ellos, porque habiendo sido cada uno de nosotros elegidos y queridos por puro amor de Dios, tenemos la convicción de que, como Dios nos amó a cada uno, nosotros, como dice la carta de Juan, tenemos que dar la vida por los hermnos.